Formado en la prestigiosa escuela de interpretación Jacques Lecoq de París y con Bernard Hiller en Los Ángeles (USA), Oscar Molina, actor, director teatral y pedagogo, tiene un amplio currículum que comprende desde “Cyrano de Bergerac” hasta “Agost” de Tracy Letts en el Teatro Nacional de Catalunya, obra aclamada por la crítica y el público, y pasando por “Van Gogh” de E. Blanchet, “Els dies feliços” de S. Beckett, “El maletí” de Ravenhill o l’” Odissea” d’Homer.

Como actor ha formado parte de parte de prestigiosas compañías como Josep m. Flotats y Joglars. Ha trabajado bajo la dirección de reputados directores como Sergi Belbel, Lluis Pascual, Josep Mª Mestres o Xavier Albertí entre otros. Su extensa trayectoria como actor y director le ha llevado a pisar los escenarios más relevantes de Barcelona (TNC, Teatre Lliure o Teatre Villaroel en Barcelona) y platós de TV y cine en producciones de RTVE o Televisió de Catalunya.

Ha dirigido numerosos espectáculos de dramaturgies extranjeras y locales, entre las que  destacan “Tancats” de Gal Soler, “La peixera”  de Toni Cabré i “Cloaca” de Maria Goos, en su etapa como director residente en el  Teatre Gaudí i al Versus Teatre de Barcelona

Para Oscar Molina la música siempre ha sido un papel destacado y no sólo como motivador de la interpretación sinó también como un sentimiento global del espectáculo. La música es más que el soporte de las partes dramáticas, es el catalizador que conduce al espectador más allá de la dirección dramática. En definitiva, la música es un intérprete más de la obra. Y en este sentido, Molina dirige a los cantantes con un trabajo que va más allá de la interpretación meramente musical, buscando la interpretación desde la profunda mirada, el corazón y el alma de quien pone la voz y el cuerpo.

Actualmente, muestra su cara más comprometida con el teatro social a través de “La crua realitat”, con dramaturgia y dirección del propio Molina, con el que aborda el trabajo con el actor Rafa Valero y su diversidad funcional.